viernes, 16 de febrero de 2018

Maternidad adolescente

Mucho se está hablando sobre la maternidad adolescente, desde que apareció la noticia de una niña de 11 años que dio a luz en un parto natural en Murcia.

Se oyen muchas voces opinando y se hacen programas de televisión hablando del tema. Pero realmente no se coge el toro por los cuernos para clarificar las causas y poder prevenir. Nadie que tenga sentido común desea que las adolescentes se queden embarazadas en ningún tipo de situación.

Entre otras cosas dicen que en estas edades tendrían que estar jugando con muñecas, ¿pero saben lo que es jugar con muñecas? A parte de las miserias que ven en televisión desde hace unas décadas, los que defienden la igualdad de sexos, dicen que las niñas tienen que jugar con otras cosas que no sean muñecas, para no confundirlas en su identidad sexual y puedan elegir su orientación sexual sin condicionantes. En fin estupideces que generan más sufrimiento que otra cosa.

Dicen expertos en la materia que una niña antes de los 18 años no está preparada físicamente para un embarazo y un parto porque corre muchos riesgos incluso vitales. ¿Que ha pasado a lo largo de toda la historia de la humanidad, que en todas las civilizaciones las mujeres parían antes de los 15? ¡Ah! pero nadie dice los riesgos físicos que corre una adolescente si aborta.

¡Que una niña antes de los 18 no debería quedarse embarazada!, por supuesto, ni a los 20 ni a ninguna edad que no tenga capacidad de gestionar y afrontar sus consecuencias, y no me refiero solo a un embarazo que es algo bueno y lo mejor que le puede pasar. Me refiero a las consecuencias emocionales que implica tener relaciones sexuales, continuadas o esporádicas, con novio o amigos o desconocidos, porque los riesgos físicos, como las enfermedades de trasmisión sexual, que están aumentando y de las que no se hablan, como un embarazo inesperado que siendo algo bueno se trata y se habla de ello como un horror, y desde luego los problemas emocionales que genera utilizar mal la sexualidad.

Que no es lo más idóneo quedarse embarazada en la adolescencia, por supuesto, pero hablemos claro, basta ya de mentiras, de ensuciar y manipular el lenguaje y desde luego formemos a los hijos en la responsabilidad que tiene cada ser humano cuando toma decisiones pues siempre tienen consecuencias, formemos a los hijos en el valor que tiene cada ser humano en su existencia vital, formemos a los hijos que el ser humano es mucho más que un cuerpo andante que pulula por el mundo a merced de sus deseos.

Que el sexo es una de las cosas más hermosas que tiene el ser humano, pero utilizarlo mal y a destiempo genera vacío, decepción y sufrimiento.

Uno de los grandes problemas que sufren los seres humanos hoy en día son problemas afectivos, porque cada vez hay menos familias equilibradas social mente, lo que implica incertidumbre, desasosiego, pero sobre todo no encontrar su sitio en el mundo el que vive. Condenándole a buscar desesperada mente donde y con quien encajar. La etapa de la adolescencia es una etapa de la búsqueda de yo, frágil y vulnerable, que debería estar arropada por una familia de verdad, estable emocional mente.

Lo que queda claro es que cualquier cosa no vale, que nada es relativo, que el ser humanos necesita, estabilidad, en su entorno vital, necesita referentes de autoridad y de ternura, necesita que esta sociedad reaccione y vuelva a educar en valores humanos de respeto, de orden, de ilusión por lo que es bueno, para que tome decisiones con responsabilidad y capacidad de gestionar y afrontar las consecuencias.